Rafael Gil de Haza,autor del asesinato de su hija de 12 años suicidándose posteriormente, recibía tratamiento psiquiátrico ya que estaba inmerso en una profunda depresión. Nadie sabe que es lo que le pasó por la cabeza a este hombre para realizar este acto, aunque la depresión que padecía,podría ser el detonante. También se especula con una "venganza" contra su mujer,aunque dicha mujer en las declaraciones posteriores, apuntó que su relación era normal y en el Instituto Andaluz de la Mujer no hay constancia de denuncia alguna por parte de ella.

En la investigación del caso, ya no se tienen dudas de que fue Rafael el que disparó. Al parecer madre e hija durmieron juntas en el dormitorio principal de la casa, y al irse a preparar el desayuno,Rafael entró en el dormitorio y disparó a la sien de la niña para luego dispararse él. El arma empleada fue una de 9 milímetros que no era la reglamentaria.

En el día de ayer, se practicaron las autopsias a ambos cuerpos en el instituto de Medicina Legal de Cádiz y los resultados de las mismas han sido remitidos al juez instructor del caso,tras ello se realizó la incineración de los cuerpos en El Puerto de Santa María. Por otro lado, la madre de la niña María del Carmen Cordero esta siendo arropada por la familia ya que aún está en estado de shock, estado que llamó la atención en un principio a los investigadores, y que según los expertos,desembocará en una desolación tremenda cuando vuelva a la realidad y se de cuenta de lo que realmente ha pasado.