Desde los embutidos y quesos más tradicionales hasta nuevos platos de diseño especialmente creados dentro de lo que podría considerarse ‘cocina de autor’ por la innovación, tanto en las recetas como en la presentación.

Así podría definirse la nueva oferta gastronómica que viene a completar la cocina más típica de La Isla con nuevas opciones para todos los gustos. Café-tapería d’Cortés es su nombre. Ubicado al inicio de Tomás del Valle según se accede desde Real, a la izquierda, allí donde antaño estuviese el mítico ‘Sotanillo’, se labra una buena reputación este establecimiento especializado en tapas que reabre un espacio con solera pero renovando al mismo tiempo su imagen para una experiencia donde lo antiguo y lo nuevo se funde en el paladar.

Los últimos coletazos del verano, hacia septiembre -cuando el negocio comenzó a rodar- trajeron consigo platos frescos, con ciertos matices estivales. Sus champiñones rellenos de bacon y roquefort, los langostinos crujientes con espinacas o la tempura de verduras con una base de salmorejo supusieron todo un descubrimiento para quienes tuvieron el placer de degustarlos.  Ahí empezó a forjarse una clientela que ha continuado fiel a su carta desde entonces, experimentando junto a los responsables de cocina con nuevos platos que poco a poco van aumentando esta fama, de buena gastronomía, de buena relación calidad-precio y, sobre todo, de buen trato con el cliente.

Todo ello salpicado con opciones más “de toda la vida”, como su arroz con carrillada o la tapa especial de huevos a la flamenca, que a su vez fueron adaptándose a los productos de temporada, a las necesidades que llegan con el cambio de estación. Fue entonces cuando sorprendieron con el hojaldre de gulas al ajillo y huevos de codorniz, el bacalao al ajo verde o los huevos escalfados con nido de patata y crujiente de jamón.

Y esto sólo es parte de la carta favorita de su clientela, la clientela de un establecimiento que no por nuevo sabe menos de café y copas. Porque también se ha convertido en punto de encuentro para las copas de muchos grupos durante la Navidad gracias a opciones como, por ejemplo, una G’Vine con tónica especial, o la Pink 47 con sirope de fresa y su tónica a base de pimienta rosa.

Nuevas ofertas convergen así en una nueva propuesta que se oferta desde el mismo casco histórico de San Fernando salpicada por “un trato inmejorable de la mano de gente humilde, entregada y con mucho arte”, en el sentir de su clientela.

Alejandro Díaz Pinto