Foto. Antonio Quintero.

El pasado viernes 14 abril, cuando justo hacía una semana del Viernes Santo, el pueblo de San Fernando reconocía a unos de sus hijos con el título de Predilecto, la mayor distinción que un cañaílla puede recibir por parte de su Ayuntamiento y de su ciudad.

Esta distinción está fuera de colores y partidos, aquí remamos todos en la misma dirección, porque entendemos que nuestro paisano reúne los méritos y requisitos indispensables para recoger dicho nombramiento. Os hablo de Ramón Rodríguez Verdejo ‘Monchi’ Director General Deportivo y Consejero del Sevilla Fútbol Club, aquel niño que nació en el Barrio del Cristo, se hizo futbolista en el antiguo Madariaga y forjó una carrera en el club de su corazón, el Sevilla FC, aquel equipo que a principio de los años noventa no era el club que conocemos a día de hoy como ex campeón de la Europa League, no os voy hablar de Monchi y su palmarés, sus logros, o el -método Monchi- copiado y replicado en todo el mundo del fútbol; fichar barato, forjar y fomentar lo mejor del futbolista y venderlo en las grandes ligas europeas. Su método.

Pues el aquel niño de barrio volvió a serlo por unos instantes en el Real Teatro de Las Cortes, tras la lectura del acta que recogía la unanimidad de su designación por parte del consejero de presidencia Conrado Rodríguez, llegó el turno de su amigo, el periodista y director del Desmarque -Fede Quintero- que glosó una vida al completo de nuestro Hijo Predilecto y que nos sacó alguna sonrisa y muchas lágrimas. Posteriormente fue el turno de su hijo Alejandro y nos volvimos a emocionar de nuevo, asombró con las tablas y el temple que defendió su discurso para glosar de nuevo la figura de su Padre, sin duda alguna fue el momento de la gala.

En San Fernando somos muy afortunados de tener a un Hijo Predilecto como Monchi, fijaros si lleva a gala su tierra que cariñosamente se le conoce desde las hinchadas y seguidores del Sevilla FC como 'León San Fernando' jugando con las palabras de nuestra Isla de León de los Ponce de León y el actual nombre de nuestra ciudad San Fernando.

Pero aparte de llevar por todo el mundo el nombre de San Fernando, se siente orgulloso de ser cañaílla, de pasear por sus calles, de disfrutar de su playa, y de su otro barrio, La Pastora, su retiro, su pequeña patria, donde dice que acabará sus días jugando al dominó con su gran amigo Churre, Juan Antonio Sirviente gerente de Casa Naca.

Es curioso que un barrio como La Pastora cuente en su historia con dos vecinos e Hijos Predilectos de la ciudad, como lo es recientemente Monchi y el recordado y querido Alfonso Berraquero García -fallecido en 2016-, ambos hermanos de la Hermandad del barrio, la Divina Pastora de las Almas, y los dos ostentan la medalla de la provincia, la máxima distinción que reconoce la Diputación de Cádiz.

También este que les escribe se siente muy orgulloso, que dos de los vecinos más ilustres del barrio de la Pastora e Hijos Predilectos de la ciudad me hayan brindado su cariño y amistad.

Monchi, este reconocimiento que aun no te crees y que sigues en ese sueño que fue la jornada del pasado viernes, es ya una realidad, tu ciudad, tu San Fernando, tu Isla de León reconoció tu trayectoria como su hijo más predilecto, desde aquí te damos las gracias por ser como eres y por llevar nuestra tierra allá por donde vayas.

Sigue soñando con nuestra tierra, sueña con marismas y esteros, con un quejío de Camarón, un mecio del Nazareno y unas coplas de Carnaval a la luz de la Luna…

Carlos García