San Fernando premia al expresidente del Gobierno, Adolfo Suárez
José Manuel Otero Novas recoge el galardón a las Libertades Constitucionales concedido al expresidente.
El Real Teatro de las Cortes volvió a ser el escenario de la conmemoración del 24 de septiembre de 1810, fecha en la que San Fernando, la entonces Isla de León, acogió la celebración de las primeras Cortes Constituyentes de España.
El Ayuntamiento ha entregado en esta edición el premio a las Libertades Constitucionales, al expresidente del Gobierno, el recientemente fallecido, Adolfo Suárez. El encargado de recibir este significativo galardón, fue el ex ministro en varios de los Gobiernos de Suárez, José Manuel Otero Novas.
Tras recibir esta distinción de manos del alcalde isleño, José Loaiza, Otero Novas glosó sus vivencias con Suárez de quien afirmó que comandó la transición española "venciendo las inercias y resistencias de no pocos y de aquellos que pidieron en Europa que condenasen el proyecto de Suárez. Suárez no era neutral procedía de una de las Españas que quería reconciliarse. Se jugaba el pelotón de fusilamiento si erraba. Pero triunfó."
El mensaje de ilusión y esfuerzo, el éxito conseguido y al final el de la sociedad española. Sin embargo hoy cuando esos acontecimientos están en la historia tenemos el deber de la gratitud. La ciudad de San Fernando, ligada como Suárez al inicio de etapas gloriosas, hacen justicia, lo que deberían hacer siempre las autoridades, y a la vez exaltan su gran categoría moral como pueblo"
Por su parte, el alcalde de la ciudad, José Loaiza, destacó de Suárez que para hacer tuvo que deshacer primero. "Ni la decadencia de las instituciones del anterior régimen ni la quiebra económica de España, más grave aún que la crisis que ahora comenzamos a superar, le pararon; como tampoco consiguieron frenar a los españoles de aquellos años de los que hoy, aquí, en este recinto sacro para la Democracia, nos declaramos herederos".
Recordó la que considera una "fecha clave" para España. El 9 de junio de 1976, un día en el que las Cortes españolas escuchan el discurso de un ministro del Gobierno de Arias Navarro, que explica la necesidad de la Ley de Asociaciones Políticas a cuya votación se iba a proceder de inmediato.
"Lo que propone entonces Suárez con esa Ley no es una forma de continuidad del régimen más o menos edulcorada con unos pequeños reflejos de libertad, sino lo que expone aquel joven Suárez es la democracia en estado puro. Algo que poquísimos podían esperar".
“El Estado debe ser neutral ante los partidos si quiere ser justo” decía Suárez a la vez que reclamaba con valentía “escuchar la voz del pueblo, que la tiene, y que quizás sea diferente de cómo pensamos”
Doce meses después de aquella apelación a la “normalidad” ante las Cortes, Suárez había concedido una amnistía que desbloqueaba las relaciones con la oposición; había hecho aprobar una Ley de Reforma Política que removía los cimientos del orden impuesto; había disuelto el Movimiento Nacional, legalizado al Partido Comunista de España y a los sindicatos Comisiones Obreras y UGT; había creado un nuevo partido político, la UCD; y celebrado y ganado, las primeras elecciones democráticas desde la República; había puesto en marcha unas Cortes Constituyentes, que elaborarían la primera Constitución de consenso en la historia española... "Adolfo Suárez imprimió un ritmo vertiginoso al destino de España que comenzaba a levantar la cabeza, sin complejo alguno, por Europa".
El discurso de Loaiza destacó que resulta "increíble como en tan poco tiempo se puede desmontar un régimen y establecer un nuevo Estado democrático con las libertades garantizadas así como la participación plural de fuerzas políticas muy distintas, y acabar construyendo el marco constitucional en donde esa convivencia y esa concordia fuera posible".
El domingo 23 de marzo de 2014, a los 81 años de edad, murió en Madrid Adolfo Suárez. Se marchó el primer Presidente del Gobierno en la democracia. El “piloto de la Transición democrática” está enterrado bajo una lápida con el lema que resume su trayectoria política: "La concordia fue posible".
La historia ya se ha encargado de situar su imagen como el principal protagonista de la Transición, por encima tal vez del resto de los actores de uno de los periodos más prestigiosos de la historia de España.
