Voluntarios retiran 200 kilos de basuraleza en una jornada doble entre las playas y el Fuerte Urrutia

En el marco del Proyecto Libera, promovido por SeoBird Life y Ecoembes, una veintena de voluntarios llevó a cabo el pasado fin de semana dos acciones medioambientales en una sola jornada: la iniciativa 1m² por playas y océanos y una limpieza de basuraleza en el entorno del Fuerte Urrutia de San Fernando. Entre ambas actividades se lograron recoger cerca de 200 kilos de residuos.

La jornada comenzó temprano en la rampa de la Magdalena, donde los seis participantes principales —Juan, Lourdes, Cristina, Ana, Paz y su coordinador Andrés— iniciaron la travesía en kayak pese al mal estado de la rampa, a la espera de que el Ayuntamiento acometa su reparación o instale el esperado pantalán flotante.

El grupo, apoyado por el barco Conde, capitaneado por el maestro salinero Antonio Jiménez y acompañado por Juan Jesús Fabra y Juan Gallardo, avanzó por el caño Carrascón y el puente Lavaera hasta encontrarse con la embarcación en la zona del Eurovelo 8. Allí, en un ambiente de calma y sin viento, se desplazaron juntos hacia Sancti Petri, haciendo una parada en el caño Chanarro.

Durante la acción 1m² por playas y océanos, los voluntarios trabajaron en un área delimitada de 100 metros por seis, donde identificaron, clasificaron y retiraron todo tipo de residuos, principalmente plásticos, vidrios y envases. Posteriormente, se amplió el radio de limpieza en la zona del Fuerte Urrutia, donde se localizaron 25 bidones procedentes de los petaqueros y alrededor de 180 kilos adicionales de desechos.

Al finalizar, el maestro salinero ofreció a los participantes una comida de convivencia a base de costillas, pan y vino, con la que se cerró una jornada marcada por el compañerismo, el buen tiempo y la concienciación ambiental.

El material recogido fue depositado en el punto de recogida número 8 de Camposoto, con apoyo logístico del Ayuntamiento y del barco Conde

Los organizadores destacaron la importancia de estas acciones para recordar que “cuando nos demos cuenta de que la mierda no se come, será tarde”.