Romero urge al Gobierno local a poner en marcha la tramitación del PGOM de San Fernando
Moción que también solicita la creación de una Comisión Técnica y Ciudadana de Seguimiento
La formación insiste en la necesidad de que la ciudad cuente con esta herramienta de planeamiento urbanístico ante un PGOU que, después de doce años, se ha quedado desactualizado ante la nueva legislación territorial y urbanística y para las necesidades futuras de la ciudad
El portavoz municipal, Fran Romero, ha dado a conocer otra de las mociones que llevará al próximo Pleno para exigir al equipo de gobierno de López Gil y Cavada que inicie de forma inmediata los trabajos previos y la tramitación del nuevo Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), estableciendo un calendario y una hoja de ruta pública tal y como contempla la Ley 7/2021 de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA). Dicha moción también solicita la creación de una Comisión Técnica y Ciudadana de Seguimiento del PGOM, integrada por representantes de los grupos políticos, colegios profesionales, asociaciones vecinales, entidades ciudadanas y expertos en urbanismo, medio ambiente y patrimonio para promover un proceso participativo, transparente y abierto y garantizar la máxima información pública y la implicación de la ciudadanía en la definición del modelo de ciudad.
Romero subraya la importancia de esta herramienta de ordenación urbanística para solucionar diversos problemas que afectan a la sociedad isleña. Entre ellos se encuentran la falta de suelo disponible y bien planificado para uso industrial, logístico o de servicios, que dificulta la atracción de inversión y la creación de empleo local de calidad; la escasez de suelo para vivienda protegida y asequible, especialmente para jóvenes y familias trabajadoras; la desconexión entre el planeamiento urbano y los objetivos de sostenibilidad ambiental y movilidad en un municipio compacto densamente poblado y rodeado de suelos protegidos; y la necesidad de redefinir el modelo de crecimiento y regeneración urbana en coherencia con la estrategia de ciudad, el cambio climático y la resiliencia costera.
Han transcurrido más de doce años desde la aprobación del último PGOU y las circunstancias económicas, sociales, demográficas, medioambientales y normativas que hoy afronta nuestra ciudad son muy distintas de las que inspiraron aquel documento. El PGOU de 2013 fue elaborado bajo vigencia de la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) y concebido en un contexto previo a la profunda crisis inmobiliaria, a los nuevos paradigmas de sostenibilidad urbana, a la transición ecológica o a la actual legislación territorial, urbanística y medioambiental andaluza. Desde entonces, San Fernando ha evolucionado y el marco normativo también: la Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA) y su reglamento implementan un nuevo instrumento estructurante en el marco de la ordenación territorial, el PGOM, que plantea nuevos procedimientos, contenidos y determinaciones”, explica el portavoz.
“Esta nueva legislación obliga a los ayuntamientos a adaptar sus instrumentos de planeamiento al nuevo modelo y muchos municipios cercanos, como El Puerto de Santa María o Chiclana, ya han iniciado los trabajos de redacción o revisión, conscientes de la necesidad de adaptar su planeamiento al marco legal y a los nuevos retos urbanos. En cambio, San Fernando permanece rezagada, sin haber anunciado aún la redacción de su nuevo PGOM u otro instrumento de ordenación general ni un calendario para iniciar su tramitación. La consecuencia de esta inacción es que la ciudad se rige por un plan que ya no responde a las nuevas determinaciones legales ni a las oportunidades del futuro. Eso sí, presupuesto tras presupuesto como el actual se contempla una partida presupuestaria para Estudios y Trabajos Técnicos del Avance del PGOU de 365.000 euros que terminan siempre engrosando los millones de euros de superávit y remanente positivo que no se gasta este gobierno liquidación tras liquidación”, continúa Romero.
“San Fernando no puede seguir planificando su desarrollo urbano y económico con un plan que, aunque útil en su momento, ha quedado desfasado frente a los retos actuales. Es imprescindible dar el paso hacia un PGOM que ordene la ciudad del futuro con criterios de sostenibilidad, equilibrio territorial, eficiencia energética, movilidad sostenible, vivienda digna y protección del patrimonio natural y cultural. Entendemos que iniciar la redacción del nuevo PGOM no es una opción, sino una necesidad estratégica. Requiere planificación, consenso político, rigor técnico y participación ciudadana, pero también decisión política. Es momento de abrir el debate y comenzar el proceso que garantice un modelo de ciudad adaptado a la realidad del siglo XXI”, concluye Romero.







