La Noche Blanca llena de música, cultura y patrimonio en una edición multitudinaria (fotos)
Paralelamente a la Noche Blanca de este viernes, la verbena de la Misericordia y la velada de Madariaga mantuvieron viva la jornada en las barriadas y se prolongarán hasta el domingo 11 de agosto. Así como el concierto de Salitre en Bahía Sound.
Miles de isleños y visitantes disfrutaron este 8 de agosto de un programa repleto de conciertos, espectáculos, visitas patrimoniales y actividades para todos los públicos, que convirtieron el centro en un gran escenario urbano.
La música abrió y cerró la velada con gran éxito de público. La Plaza del Rey se llenó a primera hora con el concierto de la Banda Sinfónica de San Fernando, que interpretó bandas sonoras de Disney, DreamWorks y otros estudios que han marcado a varias generaciones para el público familiar bajo la batuta de Francisco Hernández Foncubierta y la participación de cantantes invitados como Mari Ángeles Marín, Juan Manuel Ramírez, Beatriz Alcázar y José Álamo. Más tarde, el saxofonista, cantaor y compositor isleño Antonio Lizana, junto a la Banda de Música Ciudad de San Fernando, protagonizó uno de los momentos más esperados, fruto de una residencia artística que arrancó aplausos y ovaciones. Destacar la colaboración del Adriano Lozano y el artista Mawi de Cádiz
El Carnaval también tuvo su espacio y reunió a numeroso público en la Alameda Moreno de Guerra con el espectáculo ‘Sal de Coplas’, que comenzó recorriendo el centro y desembocó en una gran actuación. El músico Jesús Rodas puso la nota itinerante con su propuesta en directo mientras recorría calles comerciales, creando pequeños conciertos improvisados que atrajeron a vecinos y turistas.
Los locales y plazas del centro vivieron una noche animada gracias a una programación variada que llevó música en directo a cada rincón. Actuaciones como las de Lukumi, Carlos Carpinetti, Derqui & Javier Rivas, Gallopedro, Red Sister, Sincronizados, Los Cañavaleros o Queimada Gallega llenaron terrazas y aceras, con un ambiente festivo que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.
La concentración de coches y motos clásicas fue otro de los grandes atractivos de la noche. Los participantes partieron desde el Parque Comercial Janer y llegaron a la Alameda, donde les esperaba un numeroso público. La caravana, que se convirtió en un improvisado museo del motor al aire libre, fue recibida con aplausos, aunque también vivió momentos de tensión debido a las interrupciones provocadas por el paso del tranvía. La circulación no se detuvo y en varias ocasiones se produjeron parones prolongados, lo que generó quejas entre visitantes y participantes.
El patrimonio local brilló con luz propia gracias a la apertura nocturna de espacios como el Ayuntamiento de San Fernando, el Castillo de San Romualdo, el Real Observatorio de la Armada o la Base Naval de La Carraca. Las visitas guiadas y teatralizadas agotaron plazas y permitieron descubrir la historia de la ciudad desde dentro, en un formato accesible y atractivo.
El Museo Camarón se llenó en las dos sesiones de su cata de vinos maridada con flamenco, combinando la cultura enológica con la musical en un ambiente íntimo y cuidado. Igualmente, la experiencia de realidad virtual ‘Viaje inmersivo a las estrellas’, instalada en la calle Real, atrajo a familias y aficionados a la astronomía, que pudieron vivir una propuesta innovadora y educativa.
La calle Rosario acogió un desfile de moda con la participación de firmas locales como Balmoral, Juana Ramírez y Ana Vargas, acompañado de talleres de maquillaje y peinado en plena calle que atrajeron a numerosos curiosos y participantes, aportando un toque urbano y festivo a la jornada.
El arte urbano también tuvo protagonismo con la labor de Urban Sketchers Bahía de Cádiz, que plasmó en vivo escenas de la ciudad en la calle San Rafael, captando la atención del público y sumando creatividad a la noche.
La danza fue otro gran protagonista con clases magistrales gratuitas de bulerías impartidas por las hermanas Vélez y Jesuli Carrillo en plazas como la del Carmen y la Iglesia, además de una masterclass de swing que animó el ambiente y contó con gran participación.
En Bahía Sur se celebró el Festival Aéreo con exhibición de vuelo de drones y exposición de maquetas, atrayendo a familias y aficionados a la tecnología y la aviación, que pudieron disfrutar de una experiencia innovadora.
Finalmente, en la Venta de Vargas tuvo lugar un recital de cante y baile flamenco que emocionó a los asistentes, reafirmando la fuerza y tradición del flamenco en la ciudad.
La velada incluyó además rutas interpretativas, masterclass de baile, exhibiciones tecnológicas y astronómicas, verbenas con pintacaras y actividades infantiles, así como pase de modelos y otras actividades paralelas que mantuvieron vivo el ambiente festivo hasta altas horas.
La noche se completó con rutas interpretativas por el Jardín Botánico, una masterclass de baile en la Plaza de la Iglesia y exhibiciones tecnológicas y astronómicas, todas con buena asistencia.
En conjunto, la Noche Blanca 2025 dejó patente la capacidad de San Fernando para ofrecer una propuesta cultural diversa, de calidad y con una gran respuesta de público.
Además de la intensa programación en el centro de San Fernando, la noche del 8 de agosto también estuvo viva en las barriadas con actividades populares que aportaron un ambiente familiar y cercano. La Hermandad Sacramental de la Misericordia organizó su tradicional verbena en la Plaza de la Pastora, que se desarrolla del 7 al 11 de agosto, combinando tradición, diversión y solidaridad. De forma paralela, la Verbena de Madariaga comenzó esa misma noche y también se prolongará hasta el domingo 11 de agosto, ofreciendo a los vecinos una propuesta festiva y cultural que complementó la gran oferta del centro de la ciudad.