Noche de tormenta y robos en diversos locales del centro y del polígono de Fadricas
Interior del bar Rincón de Juana.
La alerta naranja y la fuerte lluvia de la tarde noche de este domingo, fue utilizada para cometer robos en distintos locales del polígono de Fadricas y del centro de San Fernando.
En concreto, los ladrones forzaron un contenedor grande a las puertas de la empresa de pintura y chorreo de limpieza, industrial naval Falucho S.L. Lograron forzar dos contenedores y abrirlos. Su dueño se percató a las 6:00 de la mañana, cuando llegó a trabajar. De su interior “se llevaron alguna cosa, pero sin utilidad. Parece que han forzado la puerta con palanqueta para romper los puntos de soldadura. Lo que había es cuatro bombas neumáticas y dos o tres bombitas de achique, con algunas de ellas incluso estropeada. Es decir que no les va a servir de nada”, según manifestaba. Ya cambió rapidamente los candados y cierres. El propietario tiene confía en que unas cámaras que tiene instalada sirvan para detener a los ladrones. Cree que los ladrones emplearon entre 20 y 25 minutos para forzar los dos contenedores que tiene ante su nave, ubicada cerca del tanatorio.
Una calle más atrás, lograron robar en café bar El Rincón de Juana, próximo a Bahía Sur. Fue el local de mayores destrozos. La puerta no presenta daño aparente, pero un compañero le avisó de que había una hucha en la puerta, según declara Paco Gómez. “Era una hucha de una hermandad, que estaba en la puerta”. Allí los ladrones reventaron la máquina de tabaco, máquinas recreativas, máquina de cambio, forzaron la caja, y se llevaron todo el dinero, además de whisky, jamones y quesos, que estaban preparados para la Navidad. A media tarde, la empresa Securitas Direct colocaba una alarma en el local, en prevención de nuevos robos.
La Policía Nacional estuvo a primera hora en El Rincón de Juana, y tomó huellas, que esperan que sirvan para detener a los autores. “Tengo esperanza de que la cámara de Bahía Sur lo haya cogido”, decía Francisco Gómez.
Pero los robos no quedaron ahí. También un gran cristal de la Abacería La Cañaílla, en la calle General García de la Herrán, fue apedreado hasta en tres ocasiones. Gracias a que se trataba de un cristal blindado, los ladrones no pudieron romperlo. En el suelo aparecía una sudadera y en su interior una piedra, con la que se supone que el ladrón o ladrones golpearon el cristal.
A pocos metros, en el Bar Reverte, esquina Real con General Serrano, partieron el cristal de una puerta lateral con una madera y una piedra, con la que presuntamente golpearon la puerta. Una vez en el interior, los ladrones se llevaron la caja registradora, una televisión que colgaba de la pared y botellas de alcohol.
Se espera que las cámaras de la calle Real, las del Centro de Congresos o la del Banco de Santander pueda aclarar este robo.
La propietaria fue avisada a las 6.00 de la madrugada, cuando la Policía hacía patrulla por la calle Real y vio que la puerta del bar, que da a Real estaba abierta. Por allí salieron los ladrones con todo lo sustraído.
Según los afectados, los ladrones conocían dónde estaba todo y aprovecharon la alerta naranja, donde todos los cuerpos se seguridad están centrados en las inundaciones y riesgos, para acceder al interior de los locales.
Salvo el robo en Falucho S.L., los restantes han sido denunciados a la Policía Nacional y en dos de ellos se han tomado huellas.
