Gran partido, animado y con goles, el que han ofrecido San Fernando CD y Atlético Sanluqueño en el segundo partido de los isleños en el exilio. Los de José Pérez Herrera se adelantaron pronto gracias a un buen gol de Carri pero, antes del descanso, dos penaltis dieron ventaja al Atlético Sanluqueño. Tras el descanso, otra vez Carri igualó la contienda tras un lanzamiento de falta. En la segunda mitad, ambas escuadras pelearon con sus armas sin conformarse con la igualada, pero el reparto de puntos hace, a priori, justicia con lo visto en el terreno de juego.

Las bajas de Simón y Oca por sanción obligaron a reestructurar la zaga con Gabi Ramos en el eje de la zaga y Juanje y Nano en los laterales. El equipo isleño inició el partido mejor plantado y con un estelar Bruno Herrero muy cómodo en la sala de máquinas. Sin ir más lejos, un centro del jerezano llegó a Pau dentro del área. Por desgracia, el remate se marchó rozando el palo defendido por Diego García.

El buen momento azulino fue refrendado a los 9 minutos de partido. Carri cazó un balón suelto en la frontal del área y superó al arquero llevando el delirio a la grada de tribuna de Chapín. La celebración del mediapunta isleño era coreada por unos aficionados que rugieron de lo lindo con el tanto de bella factura que ponía en ventaja a los suyos.

El San Fernando no sufría con ventaja en el electrónico y esperaba mantener a raya a su rival, que poco a poco se fue estirando. El tridente atacante del Atlético Sanluqueño (Mawi, Del Moral y Oriol) buscaba constantemente la espalda de los centrales. En una jugada de este tipo a la media hora, Mawi fue derribado de espaldas a portería por un Raúl Palma que acudía a apagar el fuego en el área cañaílla. El colegiado Chavet García no lo dudó y señaló el punto fatídico. Abel Gómez engañó a Gálvez y anotó el empate.

La igualada llegó segundos antes de la pausa para la hidratación. A pesar de este ‘tiempo muerto’, el San Fernando se vio poco después sorprendido por otra acción polémica. Y es que el colegiado señaló la pena máxima en el 39’ tras una nueva caída de Mawi, esta vez a la salida de un saque de esquina. Gálvez estuvo a punto de detener el lanzamiento de Oriol, pero el esférico acabó entrando lastimosamente en la meta.

El mazazo fue brutal para un equipo que se veía impotente ante las decisiones arbitrales y desquiciado por las circunstancias. El descanso fue lo mejor para los pupilos de Pérez Herrera para recolocar ideas y salir con fuerzas renovadas. Así fue. Buba entró por Jacobo y los cañaíllas pasaron a jugar con dos puntas y un fútbol más directo. Nada más arrancar la segunda mitad, Carri mandó un lanzamiento de falta al larguero. El mediapunta estaba afinando la puntería para que, en el 52’, su trallazo besara las mallas y daba paso a un nuevo duelo con el 2-2 en el marcador.

Restaba más de media hora para la conclusión y tanto San Fernando como Sanluqueño se veían con fuerzas para llevarse el gato al agua. Los de Rafa Carrillo capearon el temporal con un tramo de fútbol combinativo en el que Rubén Gálvez tuvo que actuar en un par de acciones para evitar sustos. Sin ir más lejos, Abel Gómez le puso a prueba con un cabezazo desde el punto de penalti al que el de Aracena respondió de maravilla.