Ya era hora, sí señor, ya era hora de que lloviese y no parase en unos días. Que siga así, que caiga fuerte, que llueva, que truene, que se inunden los campos y que la madre tierra se nutra del líquido elemento tan necesario para la vida. Que las entrañas secas del subsuelo y cada una de sus grietas cuarteadas se anexionen cuando el agua las acaricie a borbotones. Y que los campos castigados de sed y de incendios respiren y vuelvan a ponerse su traje de gala verde.

¿No teníamos sequía? Pues nosotros somos así, exageraos pá tó (aunque algunos españoles ya van imitándonos) en una semana lo arreglamos todo, como en carnaval que en una semana arreglamos nuestras penas al compás de bombo y caja o en Semana Santa, que en una semana redimimos nuestros pecados al son de cornetas y tambores.

Pues bien señoras y señores (o señoraes que nos obligarán algún día a decir, pero esees tema de otro cantar) con la que está cayendo y algunos todavía no se enteran que puede caer la más grande. ¡Pero grande que puede caer! Que lo más sagrado de este país no se toca y lo más sagrado de este país es la hucha de las pensiones y el poder adquisitivo de nuestros pensionistas; que ellos mismos, gente que ha cotizado toda su vida para tener una digna jubilación y poder vivir en paz lo que les quede por vivir, tengan que salir a la calle para protestar y manifestarse es algo que denota que en este país las cosas van mal.

Señoraes, que de seguir así, en diez años, un pensionista podría perder la mitad de su poder adquisitivo, por el irrisorio 0,25 al que tienen sometido a nuestras pensiones. Lo expongo más claramente: Si hoy percibe 800€ mensuales, cifra de lo más común, dicha pensión dentro de diez años equivaldría a unos 400€. Dado que el nivel de vida, como es sabido por todos, sube anualmente y según las estimaciones europeas este año lo hará al 1,8% del IPC (Índice de Precios al Consumo). No obstante a lo largo de la década se calcula una inflación en torno al 2%, lo que supondría una perdida aún mayor ¿Se imaginan viviendo con 400€ al mes y sustentando a sus hijos y/o nietos?. ¿Algo no va bien verdad?. Cuidado que uno de los motores que sustentan nuestra sociedad son nuestros jubilados y como  se rebelen que tiemble la pirámide del bienestar político en la que algunos están cobijados inexplicablemente con la que está cayendo.

Por eso, desde aquí me sumo a toda aquella iniciativa que surja de los pensionistas, porque son nuestros abuelos y porque es nuestro futuro. Nos quieren empujar a la privatización de las pensiones y eso sería un salvese quien pueda. Quieren especular con nuestros ahorros y cotizaciones de toda una vida. Que siga lloviendo, que caiga bien fuerte y que siga apretando que aún no ha caído la tormenta más fuerte y como esta venga, aquí no nos salva ni el agua bendita.