Un momento del partido.

Buen avance del particular "Tourmalet" azulino con su victoria implacable ante un sanluqueño que perdió 0-3.

El estadio municipal "El Palmar" ha ardido, casi literalmente, durante la tarde de hoy, mientras el ambiente futbolero abrazaba una nueva victoria del San Fernando CD Y ya van...

Ambos equipos se encontraron a las 17 horas en el estadio para empezar un juego que, si bien en un primer momento parecía bastante igualado, pronto dejó patente la superioridad de los isleños, quienes no daban tregua al contrincante. Tras un susto por parte del Sanluqueño, gol anulado de Antonio Sánchez por 'fuera de juego', llegó el de verdad, en este caso, del equipo azulino que desde el minuto 7 dejó claro que se resistía a renunciar a la buena racha que desde el inicio de la temporada lo ha perseguido. Su responsable, Maldonado, tras recibir un balón "peinado de cabeza".

Fue en general un primer tiempo con muchas interrupciones debido a las constantes amarillas para ambos equipos. El ambiente estaba caldeado pero en casa, por más que lo intentaban, no lograron hacerse con el esférico. Tuvieron una nueva oportunidad en el 20, pero el paradón de Zamora evitó el empate. El segundo del San Fernando también pudo llegar en el 33, pero la chilena de Chapi no encajó el inmediatamente anterior saque de esquina. No se rindieron, el gol llegaría cinco minutos antes de concluir la primera parte gracias a un Ñoño que, insatisfecho ante un primer disparo, volvió a marcar "un golazo de vaselina tras contraatacar Carlitos".

El tercero sentenciaría a los sanluqueños en el 51, esta vez sería Ale Granado quien se hizo con la portería tras repetidas intentonas de Ñoño que apenas dejaban respirar al equipo local. Éste fue el responsable del saque de esquina que posteriormente cabeceó granado dejando el marcador en un definido 0-3. Si bien los locales hicieron lo imposible por alcanzar al menos el gol del consuelo, todas sus llegadas pudieron ser cortadas por el San Fernando, destacando la labor del portero en este duelo, así como de los defensas, que no perdonaban una. Los tres goles bien podrían haberse convertido en cinco pero la suerte quiso que ni Chapi, en solitario desde el centro del campo en el 65, ni Martínez, con su entrada en el área pocos minutos antes del silbato, lograran, finalmente, apuntar sus respectivos tantos.

Tati, Ñoño y Granado fueron pues los protagonistas de un nuevo partido, "posiblemente, entre los más serios del San Fernando" en el sentir de la afición.